El sentimiento de falta.

Todo mundo anda "correteando la chuleta". Esto no solo aplica con el dinero si no también para el trabajo, pareja, y todo tipo de cosas Siempre estamos persiguiendo más y más, tenemos algo y ya queremos otra cosa, y esto vuelve un cuento de nunca acabar.

Para entrar en este tema voy a comenzar con la siguiente historia:

José y Álvaro eran mejores amigos desde el kínder. Todas las navidades se reunían para ponerse al tanto de sus vidas ya que Álvaro vivía en otro estado y era la única fecha en la que se podían ver.

-¿Como te ha ido? – Pregunta Álvaro

-Muy bien, ya sabes, persiguiendo la chuleta, creo que necesito más dinero ¿Cómo me gustaría ganar la lotería o algo así? Si me ganara la lotería o ganara más dinero, podría hacer muchas cosas que no he podido hacer por no tener los recursos. – contesto José

A la semana siguiente, como por arte de magia, ascendieron a José a un puesto con el triple de salario. Comenzó a darse la vida que siempre quiso: iba a lugares más caros, viajaba a diferentes partes del mundo, compró un mejor auto. Al cabo de unos meses se acostumbró a ese estilo de vida.

A la navidad siguiente se volvió a encontrar con Álvaro, como de costumbre.

-¿Cómo te va en tu nuevo puesto? ¡Debes de estar muy feliz ahora con todo lo que has logrado, hasta has subido algunos kilos! – le dijo Álvaro

- Ya se – Contestó José - solo que me he descuidado un poco, siento que me vendría bien un poco de ejercicio para ponerme en forma.

Entonces terminando las fiestas decembrinas, José se metió a un gimnasio y después de 6 meses consiguió un cuerpo de modelo.

Llego diciembre y se reunió de nuevo con Álvaro.

-¡Te veo muy bien! Has estado haciendo ejercicio, ¿verdad? . Dijo Álvaro.

- Si muy bien, solo un poco de gym, ya sabes (modestamente). Solo que me siento un poco solo, ¿No tienes a alguna amiga que me presentes? Siento que las mujeres con las que he salido solo me buscan por mi dinero.

Unas semanas después conoció a una mujer muy buena de la que se enamoró perdidamente y comenzó una excelente relación.

Cuando llego la navidad, Álvaro moría de ganas de ver a su mejor amigo y que le contará como iba con su vida.

-¡Te ves muy feliz con tu mujer!

- Sí, lo estoy, solo que no me ha ido muy bien en mi trabajo, hubo un problema con la empresa y nos recortaron el sueldo a la mitad, ya no se con que pagar mis cuentas, ni siquiera he podido pagar el gimnasio. Creo que me vendría bien ganarme la lotería o algo así… FIN

Ese es el sentimiento de falta, creer que todo el tiempo necesitas algo para ser feliz, y ya que lo tienes darte cuenta de que ahora te falta algo más. La felicidad es un estado que no depende de las cosas del exterior. Si buscas la paz y la felicidad en el exterior es una perdida de tiempo y te pasará como a José, una vez que tengas lo que “te hacia falta”, te va a hacer falta algo más y así hasta el final de los días.

La verdadera paz y felicidad se encuentran aquí y ahora, en el momento presente. Cuando no estás en el momento presente experimentas el sentimiento de falta, ya que este se genera por querer tener algo que no tuviste en el pasado y que deseas tener en el futuro. Esta es la fuente del deseo, querer siempre algo en el futuro, en lugar de aceptar el momento presente tal y como es.

Tienes que comprender que todo lo que necesitas esta dentro de ti ahora mismo, sólo tienes que ir a buscarlo. Sólo recuerda que para encontrarlo tienes que luchar contra tu enemigo más grande, tu mismo. Tu ego nunca aceptará que tiene todo, siempre va a buscar llenar espacios vacíos con más de lo mismo y esa no es la solución.

Busca en tu verdadero Ser el momento presente, vence tu ego y encontrarás todo lo que necesitas, y así podrás ver que todo lo que está adentro de ti ahora, se pone a tus ordenes en sincronía con el exterior. Verás abundancia verdadera, ilimitada e infinita.